Dalton Ghetti es un curioso escultor brasileño que tiene predilección por las micro-esculturas con lápices. Utiliza la mina de grafito como lienzo, así como la propia madera y a veces el propio esmalte del lápiz. Teniendo en cuenta la fragilidad y el tamaño de la mina de grafito sus obras sorprenden a cualquiera.
Para crear sus esculturas, sostiene el lápiz en la mano bajo una fuente de luz intensa (una lámpara de mesa o la luz solar) y talla en su mayoría con una aguja de coser y una pequeña hoja de afeitar. Trabaja en intervalos muy pequeños, de una a dos horas como máximo al día cada vez que se inspira. Lo hace muy lentamente, mediante la eliminación de partículas de grafito, por lo que puede llevarle meses o incluso años completar una escultura.
Su idea es llamar la atención de la gente por las cosas pequeñas. "Lo pequeño es hermoso". La mayoría de los lápices que utiliza los encuentra tirados en calles y aceras. La obra de Dalton es un proceso de reciclado. Tranforma objetos desechados en arte.
Para Dalton, las esculturas en lápiz son un hobby y una forma de meditación que requiere mucha paciencia. Sus esculturas no están en venta, las hace para él y para sus amigos.
BRUTAL
ResponderEliminarUn artista sublime.
ResponderEliminar"Lo pequeño es hermoso" xD
Me encantan este tipo de autores que de forma humilde tratan lo diminuto como algo grande. Son desde luego los señores de lo diminuto.
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