Guerreros legendarios: Hondero Balear.

Oriundos de las Islas Baleares el Hondero Balear destaco en la historia como los mejores lanzadores de piedras que hayan existido. Fueron temidos a lo largo  y ancho del mediterráneo participando en todo tipo de violentas y sangrientas batallas. Estuvieron presentes entre las tropas romanas y cartaginenses, conociéndose su existencia desde el siglo IV. aC en grandes batallas como la librada en Sicilia o las Guerras Púnicas. Llegaron incluso a estar liderados por Julio Cesar en la conquista de las Galias.

(...) en la práctica de lanzar grandes piedras con honda aventajan a todos los demás hombres.

Diodoro Sículo, Biblioteca histórica v.17.1.

Bravos y curtidos guerreros combatían casi desnudos desprovistos de armaduras y solo protegidos por un escudo forrado con piel de cabra. Solían portar un Venablo como arma defensiva y su temida Honda que eran llamadas Fundas en Latín. Confeccionadas por artesanos  elaboradas con fibra vegetal negra, trenzada con crines o con nervios de animales. Empleaban tres tipos de hondas de distintas longitudes, según la distancia del objetivo a alcanzar. Las que no estaban usando en un momento dado, las colocaban en torno a la cabeza y la cintura.

Eran excelentes defensores y asaltantes de fortificaciones interviniendo en la batalla en primer lugar para acabar con las primeras lineas de las formaciones enemigas. Sus acertados disparos eran un verdadero problema para sus oponentes ya que rompían escudos, yelmos y hueso por igual. Una vez que eran asaltados retrocedían hasta posiciones de retaguardia para dar paso a la infantería ligera.

La honda era hecha a partir de fibras vegetales, crin de caballo, lino o esparto. Fueron creadas por primera vez en el Paleolítico sirviendo desde sus inicios a la defensa de aquel que las portabas y con el tiempo descubrieron su cualidad de arma ofensiva. Cuando no portaban sus hondas solían situarlas en sus cabezas. Llegaban a tener hasta tres hondas cada una les permitía disparar a diferentes distancias y con diferente puntería.

El proyectil que solían usar era una piedra o un plomo de un peso alrededor de los 100 gramos con los que podían alcanzar distancias de 100 metros destrozando las armaduras y a sus enemigos con increíble facilidad.

Una de sus grandes hazañas eran destruir las embarcaciones enemigas disparando a la linea de flotación de las embarcaciones con una precisión y habilidad tal que durante el asalto a las islas Baleares tuvieron los romanos que forrar de cuero las embarcaciones. Demostrada su habilidad pasaron a formar parte del ejercito de Julio Cesar.

Podéis ver este un fantástico vídeo en el que explican paso a paso como construían sus hondas. 

Guerreros legendarios. Almogávar.

Un cordial saludo.

Pin el profeta.

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